Un fondo de emergencia es “una reserva de dinero que se utiliza para hacer frente a gastos que llegan de forma repentina y extraordinaria”, indica el un grupo financiero BBVA. Su objetivo no es generar rentabilidad, sino proteger en situaciones como: sucesos médicos, reparaciones urgentes, desempleo, entre otras.
Según la multinacional Morgan Stanley, contar con este fondo evita recurrir a deudas mediante tarjetas de crédito o préstamos. Además, permite “conservar tus otros ahorros o inversiones intactos para tus metas a largo plazo”, agrega PayPal.
¿Cuánto dinero debería tener un fondo de emergencia?
Aunque no existe una cantidad fija, los expertos recomiendan tener un fondo que cubra entre tres y seis meses de gastos esenciales (vivienda, comida, servicios, salud). Morgan Stanley señala que el monto puede variar dependiendo del tipo de trabajo, ingresos o patrimonio de una persona.
En este sentido, si tus gastos mensuales básicos son $400, poco menos del salario mínimo vigente en El Salvador, lo ideal sería tener entre $1,200 y $2,400 disponibles para emergencias.
Más allá de la cantidad, para PaPal lo importante es empezar a armar el “colchón” financiero. “Si no puedes permitirte ahorrar mucho al principio, considera empezar con pequeñas aportaciones y aumentarlas gradualmente con el tiempo”, recomienda.
¿Dónde guardar un fondo de emergencia?
El fondo de emergencia debe ser seguro y accesible, es decir, que se pueda retirar rápidamente. Por ello, se recomienda guardar el dinero en efectivo o en una cuenta de ahorro con disponibilidad inmediata.
Lo primordial es evitar usar herramientas de inversión de alto riesgo o que bloqueen tu capital, ya que podrías no acceder a tu dinero cuando lo necesites.
Cómo crear y gestionar un fondo de emergencia
- Analiza tus gastos básicos mensuales: haz una lista realista de lo que necesitas para vivir sin lujos.
- Fija un objetivo de ahorro: apunta a 3-6 meses de gastos esenciales.
- Haz aportes constantes: dedica un porcentaje de tu ingreso cada mes a este fondo. Algunos bancos permiten automatizar transferencias para hacerlo más fácil.
- Usa el fondo solo para emergencias reales: si lo usas, traza un plan para reponer lo gastado lo antes posible.
- Revisa periódicamente: conforme cambien tus circunstancias (familia, empleo, gastos), ajusta el monto objetivo.